
Diecisiete años después de su fundación, en 2003, Masbosques continúa siendo una organización pionera en la implementación de estrategias para la conservación de los ecosistemas naturales de la mano de las comunidades que los habitan.
Masbosques siempre ha tenido un objetivo claro, promover la conservación mediante la unión de todos los actores del territorio. “En Masbosques posibilitamos que los gobiernos locales, las autoridades ambientales y las organizaciones públicas y privadas trabajemos en pro de la conservación de los ecosistemas naturales y mejorar la calidad de vida de nuestras comunidades”, afirma Jaime Andrés García Urrea, director de la corporación.

Desde sus inicios en Masbosques, han comprendido los desafíos que enfrentan al trabajar en un país forestal como lo es Colombia, una de sus apuestas para el 2022 es realizar el aporte de las metas nacionales de reforestación, más de 15 millones de árboles, gracias al compromiso de 5.157 familias en el departamento de Antioquia, por medio de la alianza entre las cuatro autoridades ambientales, el Ministerio de medio ambiente y desarrollo sostenible y empresas privadas.
Este año la Corporación para el manejo sostenible de los bosques Masbosques celebró 17 años trabajando por un cambio encaminado a la sostenibilidad. Un compromiso con el planeta que la ha llevado a trabajar en estos años por un mundo en el que la calidad de vida de las comunidades y la conservación de los ecosistemas naturales sean una realidad.

No sólo celebran un año más como corporación, celebran el compromiso de campesinos como Aldemar y doña Rosita, de las comunidades indígenas, afrodescendientes y raizales, quienes salvaguardan las riquezas naturales de nuestro país, conservando los bosques, los páramos, los arrecifes coralinos y los manglares.
Vinculando al sector privado para compensar la huella ambiental que dejan sus acciones empresariales; a los entes gubernamentales y autoridades ambientales que han sido grandes aliados para llegar a todo el territorio nacional.
Su estrategia de Pagos por Servicios ambientales
Esta corporación se ha posicionado como una pionera en la implementación de estrategias ambientales replicables y sostenibles, es el caso de la estrategia de Pagos por Servicios Ambientales BancO2, con la que desde 2013 alrededor de 20 mil familias campesinas, comunidades indígenas, afrodescendientes y raizales se han comprometido con la protección de 200 mil hectáreas de ecosistemas fundamentales para la protección de servicios ambientales y para la regulación del ciclo hídrico como los páramos, los manglares y los bosques, en la jurisdicción de 22 autoridades ambientales.

Así mismo, han promovido otros incentivos a la conservación, con los que apoyan la restauración de 8 hectáreas de arrecifes coralinos, en la isla de San Andrés y Providencia, de la mano de 29 pescadores raizales y las autoridades ambientales y departamentales del archipiélago.
Pero esto no se detiene ahí, en unión con Argos y Corpoboyacá, se compensó la labor de 150 familias alfareras y caleras de los municipios de Nobsa y Sogamoso en Boyacá, que detuvieron el fuego de sus hornos con el fin de evitar la emisión de 241.586 toneladas de carbono a la atmósfera.
Esta estrategia ha expandido sus fronteras llegando hasta Perú, donde en alianza con el Banco Interamericano de Desarrollo a través del BID Lab, la Universidad Católica Sedes Sapientiae, el Ministerio de Ambiente de Perú y Helvetas, al igual que con el Centro Internacional de Agricultura Tropical CIAT y el Icontec, se implementará por primera un PSA.
En este país, 1200 familias productoras de café y cacao, conservarán 15 mil hectáreas de paisajes asociados a la implementación de cultivos con especies forestales, con los cuales se proyecta capturar 100 mil toneladas de CO2.

En busca de la sostenibilidad social y ambiental
Su constante búsqueda de la sostenibilidad social y ambiental, les ha facilitado aportar a la calidad de vida de las comunidades rurales mediante la implementación de proyectos productivos que fortalezcan sus economías en equilibrio con los ecosistemas naturales que habitan.
“Nuestra meta siempre ha sido que la calidad de vida que logramos mejorar con nuestros proyectos perdure en el tiempo, es decir que nuestras comunidades inviertan el dinero que reciben de una compensación en el fortalecimiento de un sistema productivo que les permitan diversificar su economía y buscar su sostenibilidad.” Declara Jaime Andrés García Urrea, director.
Es así, como nacen marcas como miel, arroz y café BancO2, con las cuales se incentiva el comercio justo y local. Además, se promueve el ecoturismo consciente y responsable gracias a las experiencias que ofrece Paisajero, una agencia de viajes que hace posible la inmersión en experiencias de ser campesino por un día o recorrer entre rutas los paisajes del oriente antioqueño.

Resiliencia al cambio climático
Este es otro de los enfoques de esta corporación con el que buscan que las organizaciones públicas y privadas, desarrollen iniciativas creadas a la medida de sus necesidades, para lograr su adaptación al cambio climático, por lo que hoy cuentan con 250 empresas que se hacen responsables de sus impactos ambientales y compensan su huella a través de sus proyectos.
Alejandro Henao, gerente de Mane Colombia manifiesta, “encontrar organizaciones como Masbosques, con un enfoque tan claro en procesos de conservación en común con la institucionalidad y las comunidades de los territorios, nos han permitido a nosotros como empresa en estos cuatro años de compensación tener la oportunidad de ser más responsables con los impactos que generan nuestras actividades, además de buscar la neutralidad de las emisiones de gases de efecto invernadero, así como promover la sostenibilidad de las familias a través de los proyectos productivos que lidera la corporación. Este tipo de estrategias tiene un gran componente ambiental y social”, finaliza el empresario.
Un reconocimiento a su labor
Éste ha sido un gran año para Masbosques, no solo continúa con la consolidación de sus proyectos tanto nacional como internacionalmente, también ha sido elegida como finalista en el premio Bibo del Espectador, en la categoría guardianes del agua y del suelo con el que se reconoce la labor de las comunidades rurales, indígenas y afrodescendientes, entes gubernamentales, autoridades ambientales, organizaciones públicas y privadas con las que promueve que el cambio y la sostenibilidad están en manos de todos.
Han sido años en los que esta corporación ha conformado un equipo innovador, comprometido con el planeta y apasionado por cumplir los propósitos de su trabajo, por lo que continuará promoviendo alianzas entre el sector público y privado, para conservar la riquezas naturales del segundo país más diverso del mundo, de la mano de las comunidades que lo habitan.